Como ya sabéis a poco que paséis por este blog, en nuestra casa gusta la comida internacional (la nacional también, pero esa ya la comemos todos los días). Así que cuando nos enteramos de que abrían este restaurante mexicano allá por el mes de septiembre pasado no lo dudamos: había que probarlo sí o sí.
Esta decoración tan peculiar homenajea uno de los entretenimientos más populares en México: la lucha libre. De ahí el nombre del restaurante,como ellos mismos explican, la quebradora es una llave que consiste en levantar al rival y dejarlo caer sobre la rodilla castigando la espalda del contrincante. Ufff, eso tiene que doler...
Vista la decoración tan poco habitual en un restaurante mexicano, llegamos pensando que la comida que servirían serían también poco típica y más oriunda, es decir, menos tacos, burritos y nachos y más pozole, tamales, cochinita pibil, mole, no sigo que se me hace la boca agua.... Pero nos equivocamos.
Aunque según la publicidad del restaurante los platillos que preparan corresponden a "la auténtica cocina mexicana y están elaborados con productos traídos de México y por cocineros nativos", lo cierto es que lo que ofrece su carta, en general, no difiere mucho de lo que hasta ahora habíamos podido degustar en los restaurante mexicanos ya existentes en la ciudad. Así que por ahí poco o nada que decir. Ah, por cierto, aunque en la carta no lo pone por ningún lado, el IVA no está incluido en los precios, así que tenerlo en cuenta.
Lo que de verdad nos gustó fue el Menú del día, porque ahí sí pudimos encontrar algún plato puritito mexicano y a un precio interesante para ser fin de semana: 11,50 + IVA y café incluido.
Así que ahí fuimos de cabeza con el menú del día, comenzando con el aperitivo. Una bola de patata con frijolitos y pico de gallo. Una buena forma de abrir boca.
No hemos comentado que la comida de La Quebradora no pica, te sirven varios tarritos con diferentes salsas que van de apto para chamaquitos a puritito macho. Así que tu eliges como quieres que sea tu comida. A mí esto no me gusta, ya que para mí es como servir una tortilla de patata con la cebolla aparte para que cada cual se ponga según su gusto ¿os imagináis? No es lo mismo, pero es la forma de que a todo el mundo le guste la comida mexicana.
De primero, Ceviche mixto con aguacate y plátano frito. Delicioso.
Y Ensalada Mex, se trata de una ensalda templada de verduras a la plancha y variación de canónigos, rúcula y escarola, también estaba rica.
De segundo, Chilaquiles, totopos con salsa de chile rojo y carne de res. Un plato correcto.
Y Bacalao al Pipian, un bacalao delicioso, suave y jugoso en una cama crujiente de semilla y acompañado de plátano frito. Maravilloso.
Llegó la hora de los postres, por un lado, Flan de maíz acompañado de queso suave. Aunque la textura no era la típica de un flan sino más bien de un pudin, el sabor es excelente.
Y Bizcocho de chocolate en cama de mandarina y con espuma de maracuyá. También muy rico sobre todo por la maracuyá tampoco habitual por estas tierras.
Como ya hemos comentado en el menú, estaba incluido el café que nunca puede faltar como colofón de una buena comida.
Aquí está lo peor, peor de comer en cualquier restaurante: la cuenta.
El resultado general nos gustó, los platos que probamos eran sabrosos y diferentes, estaban bien presentados y el servicio fue rápido y atento aunque les faltaba algo de experiencia.
De hecho nos gustó tanto que decidimos repetir otro domingo. Era 7 de Diciembre, habían pasado casi dos meses desde nuestra primera visita y ya nos regodeábamos pensando en los platillos que íbamos a comer, cuando al llegar al restaurante descubrimos que el Menú del Día se había estandarizado, estaba impreso en una hoja con membrete del restaurante y era exactamente el mismo de la última vez. Además, incomprensiblemente el menú costaba 2 euros más si era consumido el fin de semana. Vaya que desilusión...
Bueno, estábamos decididos a comer mexicano, así que nos dijimos, bueno pues probamos los otros platos del menú que no comimos antes y listo. Así que, alá pa' dentro!
De nuevo comenzamos con el aperitivo, parece que la bola de patata había crecido un poco y la presentación era mejor, la hacía más apetitosa...
De primero, Envuelto de salteado de setas. Si encontrarnos con que el menú no había variado en dos meses había sido nuestra primera decepción, este plato fue la segunda. Como podéis apreciar en la imagen no es más que una tortilla francesa de setas acompañada de patatas gajo. Lo mejor, desde luego, las patatas....
Y Fetuccini "técnico" con salsa de queso, vamos pasta con salsa, muy poco mexicano...
Los primeros no habían sido gran cosa, por lo que esperábamos ansiosos los segundos deseando que nuestra comida mejorara.
De segundo, Tiras de Bistec de Ternera con patata al horno. Pssst, ni bueno ni malo, pero la patata que acompañaba la carne era incomible, estaba fría y, desde luego, no era recién horneada, por lo menos de la noche anterior.
Y Pollo deshuesado aliñado con pesto de cilantro. Algo así como un nugget gigante con ensalada.
En cuanto a los postres, no había sorpresas pues eran los mismos del menú anterior, es decir, Bizcocho de chocolate.
Y Flan de maíz horneado.
Resumiendo, nuestra segunda visita fue más bien para olvidar y no estropear de esa forma el buen sabor de boca que nos dejó la primera vez que comimos en La Quebradora. El problema es que si en octubre alguien me hubiera preguntado, yo se lo habría recomendado de cabeza, pero ahora, ya no estoy tan segura.
El cambio en las presentaciones de los platos, mucho más cuidadas en octubre que en diciembre (no hay más que ver la espuma de maracuya prácticamente inexistente en la foto de diciembre, o cualquiera de las fotos de los platos principales que no tienen nada que ver con lo apetecibles a la visa que resultaban en nuestra primera visita, al menos es mi parecer) y en la calidad de los platos elaborados me hace suponer que ha habido un cambio en la cocina de La Quebradora.
Tampoco me agrada que mantengan el mismo menú del día durante meses. Según nos han comentado en La Quebradora, tienen previsto cambiar el menú en enero,así que ya debería haber un nuevo menú del día, pero a mi modesto entender, si quieren tener un público más fiel, el cambio debería realizarse al menos cada dos semanas e incluir más platos típicamente mexicanos, porque para comer pasta y pollo (mejor o peor cocinados) ya hay muchos sitios en Zaragoza.
Por último, no quiero dejar de comentar que hay disponible un menú express a 7,50 € IVA incuido.
Y el menú degustación Sabor México a 28 € IVA incluido.
Bueno pues ahí queda eso, yo, a pesar de todo, igual me animo a probar el nuevo menú de enero...
Vista la decoración tan poco habitual en un restaurante mexicano, llegamos pensando que la comida que servirían serían también poco típica y más oriunda, es decir, menos tacos, burritos y nachos y más pozole, tamales, cochinita pibil, mole, no sigo que se me hace la boca agua.... Pero nos equivocamos.
Aunque según la publicidad del restaurante los platillos que preparan corresponden a "la auténtica cocina mexicana y están elaborados con productos traídos de México y por cocineros nativos", lo cierto es que lo que ofrece su carta, en general, no difiere mucho de lo que hasta ahora habíamos podido degustar en los restaurante mexicanos ya existentes en la ciudad. Así que por ahí poco o nada que decir. Ah, por cierto, aunque en la carta no lo pone por ningún lado, el IVA no está incluido en los precios, así que tenerlo en cuenta.
Lo que de verdad nos gustó fue el Menú del día, porque ahí sí pudimos encontrar algún plato puritito mexicano y a un precio interesante para ser fin de semana: 11,50 + IVA y café incluido.
Así que ahí fuimos de cabeza con el menú del día, comenzando con el aperitivo. Una bola de patata con frijolitos y pico de gallo. Una buena forma de abrir boca.
No hemos comentado que la comida de La Quebradora no pica, te sirven varios tarritos con diferentes salsas que van de apto para chamaquitos a puritito macho. Así que tu eliges como quieres que sea tu comida. A mí esto no me gusta, ya que para mí es como servir una tortilla de patata con la cebolla aparte para que cada cual se ponga según su gusto ¿os imagináis? No es lo mismo, pero es la forma de que a todo el mundo le guste la comida mexicana.
De primero, Ceviche mixto con aguacate y plátano frito. Delicioso.
Y Ensalada Mex, se trata de una ensalda templada de verduras a la plancha y variación de canónigos, rúcula y escarola, también estaba rica.
De segundo, Chilaquiles, totopos con salsa de chile rojo y carne de res. Un plato correcto.
Y Bacalao al Pipian, un bacalao delicioso, suave y jugoso en una cama crujiente de semilla y acompañado de plátano frito. Maravilloso.
Llegó la hora de los postres, por un lado, Flan de maíz acompañado de queso suave. Aunque la textura no era la típica de un flan sino más bien de un pudin, el sabor es excelente.
Y Bizcocho de chocolate en cama de mandarina y con espuma de maracuyá. También muy rico sobre todo por la maracuyá tampoco habitual por estas tierras.
Como ya hemos comentado en el menú, estaba incluido el café que nunca puede faltar como colofón de una buena comida.
Estando en un restaurante mexicano no podíamos dejar de probar sus Margaritas. Lamentablemente, no fue lo más memorable de la comida....
El resultado general nos gustó, los platos que probamos eran sabrosos y diferentes, estaban bien presentados y el servicio fue rápido y atento aunque les faltaba algo de experiencia.
De hecho nos gustó tanto que decidimos repetir otro domingo. Era 7 de Diciembre, habían pasado casi dos meses desde nuestra primera visita y ya nos regodeábamos pensando en los platillos que íbamos a comer, cuando al llegar al restaurante descubrimos que el Menú del Día se había estandarizado, estaba impreso en una hoja con membrete del restaurante y era exactamente el mismo de la última vez. Además, incomprensiblemente el menú costaba 2 euros más si era consumido el fin de semana. Vaya que desilusión...
Bueno, estábamos decididos a comer mexicano, así que nos dijimos, bueno pues probamos los otros platos del menú que no comimos antes y listo. Así que, alá pa' dentro!
De nuevo comenzamos con el aperitivo, parece que la bola de patata había crecido un poco y la presentación era mejor, la hacía más apetitosa...
De primero, Envuelto de salteado de setas. Si encontrarnos con que el menú no había variado en dos meses había sido nuestra primera decepción, este plato fue la segunda. Como podéis apreciar en la imagen no es más que una tortilla francesa de setas acompañada de patatas gajo. Lo mejor, desde luego, las patatas....
Y Fetuccini "técnico" con salsa de queso, vamos pasta con salsa, muy poco mexicano...
Los primeros no habían sido gran cosa, por lo que esperábamos ansiosos los segundos deseando que nuestra comida mejorara.
De segundo, Tiras de Bistec de Ternera con patata al horno. Pssst, ni bueno ni malo, pero la patata que acompañaba la carne era incomible, estaba fría y, desde luego, no era recién horneada, por lo menos de la noche anterior.
Y Pollo deshuesado aliñado con pesto de cilantro. Algo así como un nugget gigante con ensalada.
En cuanto a los postres, no había sorpresas pues eran los mismos del menú anterior, es decir, Bizcocho de chocolate.
Y Flan de maíz horneado.
Resumiendo, nuestra segunda visita fue más bien para olvidar y no estropear de esa forma el buen sabor de boca que nos dejó la primera vez que comimos en La Quebradora. El problema es que si en octubre alguien me hubiera preguntado, yo se lo habría recomendado de cabeza, pero ahora, ya no estoy tan segura.
El cambio en las presentaciones de los platos, mucho más cuidadas en octubre que en diciembre (no hay más que ver la espuma de maracuya prácticamente inexistente en la foto de diciembre, o cualquiera de las fotos de los platos principales que no tienen nada que ver con lo apetecibles a la visa que resultaban en nuestra primera visita, al menos es mi parecer) y en la calidad de los platos elaborados me hace suponer que ha habido un cambio en la cocina de La Quebradora.
Tampoco me agrada que mantengan el mismo menú del día durante meses. Según nos han comentado en La Quebradora, tienen previsto cambiar el menú en enero,así que ya debería haber un nuevo menú del día, pero a mi modesto entender, si quieren tener un público más fiel, el cambio debería realizarse al menos cada dos semanas e incluir más platos típicamente mexicanos, porque para comer pasta y pollo (mejor o peor cocinados) ya hay muchos sitios en Zaragoza.
Por último, no quiero dejar de comentar que hay disponible un menú express a 7,50 € IVA incuido.
Un menú Cantina Mex a 20 € IVA incluido.
Y el menú degustación Sabor México a 28 € IVA incluido.
Bueno pues ahí queda eso, yo, a pesar de todo, igual me animo a probar el nuevo menú de enero...
Al empezar a leer me había ilusionado con un nuevo mexican pero al finalizar me he desilusionado mucho.
ResponderEliminarAl empezar a leer me había ilusionado con un nuevo mexican pero al finalizar me he desilusionado mucho.
ResponderEliminarBueno, esta entrada es un gran ejemplo de que cada uno cuenta la feria según como le va. Nosotros, en nuestra primera visita nos quedamos encantados con la comida y el precio del Menú, aunque el servicio nos pareció bastante flojo. Nos gustó tanto que repetimos. Si no hubiéramos vuelto, pues todo muy bien. Claro, en nuestra segunda visita, la comida fue horrible y el servicio tampoco había mejorado :/ En fin se te gusta el Texmex, igual es un sitio estupendo pero si busca el auténtico sabor de México, olvídate...
EliminarEs recomendable, aunque mis hermanos que son expertos en comida mejicana me dicen que es preferible el Jalisco en C/Escoriaza y Fabro. A mi personalmente me gusto, en la foto de las salsas falta la mas potente para amantes del picante hay una opción casi masoca de salsa de chili de arbol
ResponderEliminarSí, es verdad, en nuestra primera incursión no nos la ofrecieron pero sí en la segunda visita (a mí me encanta el picante). En cuanto al Jalisco, no es comparable. La comida está bien, pero el local deja mucho, pero mucho que desear. No es que sea cutre es que está descuidado, poco limpio y desordenado. En fin que da un poco de grima. Gracias por tu comentario David.
EliminarYo lo que peor veo es la poca variedad en el menú y que lo mantienen demasiado tiempo. Renovación cada dos meses y comida de verdad mexicana
ResponderEliminarPues sí, eso de tener el mismo menú del día tanto tiempo, estimula muy poco al cliente a frecuentar su local. Por no hablar de la calidad de la comida, tan desigual.
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